You Are Invited (John 10:9, Spanish)
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- Format: Folded Tract
- Size: 3.5 inches x 5.5 inches
- Pages: 4
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Jesús dijo, “Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo.” Juan 10:9
Jesús es el Hijo de Dios. Dios envió a su Hijo para salvarnos.
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su único Hijo, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna” (Juan 3:16).
Por qué fue enviado el Hijo de Dios? Porque la humanidad pecó.
“Por cuanto todos pecaron” (Romanos 3:23).
Todo pecador necesita ser salvado (esto es salvación). Jesús es el único que salva.
“…Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo dado a los hombres en que podamos ser salvos.” [Dios no ha provisto al mundo ninguna alternativa para Salvación] (Hechos 4:12).
Los que son salvos pueden ir al cielo para estar con Dios para siempre. Jesús dijo:
“De cierto, de cierto os digo, el que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna. No vendrá a condenación, mas ha pasado de la muerte a la vida” (Juan 5:24).
Los que mueren sin ser salvos irán al infierno—a causa del pecado y la incredulidad. El infierno es un lugar de continuo tormento.
“Entonces estos [los incrédulos] se irán al castigo eterno [sin fin], pero aquellos que son justos y en buena posición con Dios [irán, por Su notable gracia] a la vida eterna [interminable]” (Mateo 25:46).
Jesús murió en una cruz para pagar nuestra deuda del pecado. Dios lo resucitó de entre los muertos.
“Quien llevó el mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero” (1 Pedro 2:24).
“Dios resucitó a Jesús de entre los muertos” (Hechos 2:32).
Al confesar al Señor Jesús, y creyendo en que Dios lo resucitó de entre los muertos, serás salvado.
“Que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo” (Romanos 10:9).
Aquí hay una manera de declarar que crees en Jesús:
“Señor Jesús, reconozco que moriste en una cruz. Dios te levantó de entre los muertos. Yo he pecado. Perdóname. Sálvame. Sé mi Señor y Salvador. Amén.”
Si tú has confesado tu creencia en Jesucristo, “Felicidades!”
Eres un Hijo de Dios.
“Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su Nombre, les dio potestad de ser hijos de Dios” (Juan 1:12).
Estos son los siguientes pasos que puedes tomar:
1. Empezar a hablar con Dios.
2. Encontrar y visitar una iglesia Cristiana basada en la Biblia.
3. Empezar a leer la Sagrada Biblia.
Dios te ama. Vive para El. Tú nunca volverás a ser el mismo, para el bien.
“Al único que hace grandes maravillas, porque Para siempre es su misericordia” (Salmo 136:4).
Bendiciones!