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Si usted fuera totalmente honesto, probablemente marcó más de una caja. Si es así, usted no está solo. Ahora vamos a ser honestos con nosotros mismos. ¿Cómo llamamos a una persona que dice una mentira? Un mentiroso, ¿correcto? ¿Cómo llamamos a una persona que toma algo que no le pertenece? Un ladrón, ¿correcto? Ahora bien, si una persona marca sólo las primeras dos cajas, ¿qué es esa persona? Un ladrón que miente, ¿correcto? Si un asesinato hace que una persona sea un asesino, entonces una mentira hace que una persona sea un mentiroso. Estas cosas son lo que llamamos “pecados”. Cometer un pecado hace a una persona un “pecador”. Sobre la base de una mentira, y un robo, un hombre se parará delante de Dios y será juzgaría como ladrón y mentiroso. ¿Cómo te juzgaria Dios, si murieras hoy? “Y de la manera que está establecido a los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio;” Hebreos 9:27 ¿Quieres ir al Cielo o al Infierno? Dios dice que para que una persona pueda ir al Cielo, es necesario nacer de nuevo. Jesús le dijo a Nicodemo (un hombre muy religioso) “Os es necesario nacer otra vez.” Juan 3:7. “Nacer de nuevo” significa ser “salvo.”

Estas son algunas de las cosas que Dios quiere que usted sepa:

Usted es un pecador, si marcó solo una caja,lo cual has admitido. La Palabra de Dios nos enseña que todos somos pecadores, ninguno de nosotros es justo. “por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios;” Romanos 3:23

“Como está escrito: No hay justo, ni aun uno.” Romanos 3:10.

Hay un precio a pagar por el pecado.

“Porque la paga del pecado es muerte...” Romanos 6:23a, Esto significa que la pena del pecado sólo puede ser pagada con la muerte. Esta muerte incluye una separación eterna de Dios en el infierno. El infierno es un lugar de fuego eterno, tormento y tristeza. Lucas capítulo 16 nos habla de un hombre que ha estado en el infierno por más de 2000 años, llorando, siendo atormentado en las llamas.

Pero hay buenas noticias!

Dios te ama tanto que Él hizo un camino para escapar del castigo del pecado.

“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. Juan 3:16

Dios dio a su Hijo unigénito para morir por tus pecados como tu sustituto.

“Al que no conoció pecado, lo hizo pecado por nosotros, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en Él.” 2 Corintios 5:21

“Mas Dios encarece su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” Romanos 5:8. Cuando Cristo murió en la Cruz, derramó Su preciosa sangre para limpiarnos de todo pecado. La sangre es necesaria: “Porque la vida de la carne en la sangre está;” Lev. 17:11 y “y sin derramamiento de sangre no hay remisión.” Hebreos 9:22.

La Palabra de Dios nos dice que nuestros pecados fueron puestos sobre Cristo y que el murió en nuestro lugar en la cruz del Calvario. La Palabra de Dios es verdad.

Permiteme explicarle como puedes recibir al Señor Jesucristo como sustituto por tus pecados, y ser salvado de la pena del pecado:

Dios quiere que te arrepientas. Este arrepentimiento significa que usted está de acuerdo con Dios, que eres un pecador y crees que Dios es justo. Usted admite que necesita un Salvador, y acepta lo que Cristo hizo en la cruz por tus pecados como su Salvador.

“El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento.” 2 Pedro 3:9

En Hechos 16:30-31, el carcelero de Filipos les preguntó a Pablo y Silas una pregunta. “Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo? Y ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo tú” Usted deberá ser salvo la misma manera como el carcelero. Basta con creer en Jesucristo como el único que pagó por tus pecados, murió en tu lugar, y que Dios le levantó de los muertos. La resurrección de Cristo es lo que declara que Él es el Hijo de Dios con poder, según Romanos 1:4. Su resurrección es lo que nos asegura la vida eterna! Jesús le dijo a Marta en Juan 11:25-26 “Jesús le dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. ¿Crees esto?”

Ahora, ¿Cree usted esto? Si usted cree esto, invoca el nombre del Señor Jesucristo, y Él te salvará! “Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo.” Romanos 10:13

Dice que “será salvo”. No hay lugar para la duda. Es una cosa definida, ya que Dios no puede mentir. Si ya has admitido que eres pecador, estás en el lugar adecuado para ser salvo, porque el Apóstol Pablo escribió:

“Palabra fiel y digna de ser recibida por todos; que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.” 1 Timoteo 1:15

Ahora sólo tienes que orar a Dios. No hay oración perfecta necesaria para ser salvo, pero esto le ayudará a orar. “Señor Dios, yo sé que soy un pecador, y que no me puedo salvar a mi mismo. Creo que Jesús fue mi sustituto cuando murió en la cruz. Creo que su sangre derramada, su muerte, sepultura y resurrección fueron para mí. En este momento lo recibo como mi Salvador. Gracias por salvar mi alma, y por darme la vida eterna. En el nombre de Jesús, Amén.”

Es su fe en la promesas del Dios de la salvación, que le salva. Si realmente creyó en el Señor Jesucristo, en este momento, entonces usted tiene la promesa de la vida eterna. Es tuya!

“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe, y esto no de vosotros; pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe.” Efesios 2:8-9

Según la Biblia, usted puede saber que tiene vida eterna!

“Estas cosas os he escrito a vosotros que creéis en el nombre del Hijo de Dios, para que sepáis que tenéis vida eterna, y para que creáis en el nombre del Hijo de Dios.” 1 Juan 5:13

Sus sentimientos cambian, las circunstancias cambian, pero la Palabra de Dios nunca cambia ... y usted puede confiarla!

Si usted es salvo, hay 3 cosas necesarias para el crecimiento espiritual.

La oracion-eso significa hablar con Dios.

Obtener una Biblia y leerla todos los dias.

Y testificar a otros acerca de lo que Cristo ha hecho por usted. Haga estas cosas todos los días.

Después de la salvación, debe ser bautizado en agua como un testimonio público de lo que Cristo ha hecho en su corazón. Encuentre una iglesia biblica donde se predica la Biblia, y donde se puede adorar al Señor, aprender de él, y crecer fuerte!

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